domingo, 28 de mayo de 2017

LOS BUENOS AMIGOS
(cuento popular Chino)
(Ilustración: Aida Zamora - Fuente: Internet)



Cuentan que hace mucho tiempo en un bosque  hubo una nevada terrible. Había bajado la temperatura muchísimo y los campos estaban blancos por al caida de tanta nieve.

Un conejito, que vivía en ese bosque,  no tenía nada para comer, así que decidió salir a buscar alimentos. Abrió la puerta de su casa y ve todo blanco, hace mucho frío.

El conejito recuerda que aún habían sembradas algunas zanahorias en su pequeña huerta. Después de mucho buscar encuentra dos zanahorias grandes. Las sacude, las olisquea y se come una.  Estaba satisfecho. 

Cuando vuelve a casa  con la zanahoria que le quedaba pensó: “Tal vez la pueda guardar”, pero entonces recordó a su amigo el caballo. “Toda la noche nevó y seguro no encontró qué comer”, se dijo y decidió ir  a su casa a darle la zanahoria.

Cuando el conejito llegó a la casa del caballo tocó la puerta y gritó:

-¡Caballo, abre, te he traído una zanahoria!

Pero el caballo no estaba en su casa. El conejo  dejó la zanahora en la puerta y se fue a su casa.

Cuando el caballo llegó a su casa vió la zanahora en la puerta y dijo:

-       ¿Pero quién habrá dejado esta zanahoria aquí?

Revisa a su alrededor y ve las huellas del conejito por todo el lugar.
- Qué bueno amigo tengo- se dijo el caballo- seguro que mi amigo el conejo dejó esto para comer. Pero… yo ya comí…mejor le llevo esta zahanora a la oveja que debe estar hambrienta.

Cuando el caballo llegó a la casa de la oveja tocó la puerta y gritó:

- ¡Oveja, abre, te he traído una zanahoria!

Pero la oveja no estaba en su casa. El caballo  dejó la zanahora en la puerta y se fue a su casa.

Cuando la oveja llegó a su casa vió la zanahora en la puerta y dijp:

- ¿Pero quién habrá dejado esta zanahoria aquí?

Revisa a su alrededor y ve las huellas del caballo por todo el lugar.

- Qué buen amigo tengo- se dijo la oveja- seguro que mi amigo el caballo me dejó esto para comer. Pero… yo ya comí…mejor le llevo esta zahanora al venado que debe estar hambriento.

Cuando la oveja llegó a la casa del venado tocó la puerta y gritó:

- ¡Venado, abre, te he traído una zanahoria!

Pero el venado no estaba en su casa. La oveja  dejó la zanahora en la puerta y se fue a su casa.

Cuando el venado llegó a su casa vió la zanahora en la puerta y dijo:

- ¿Pero quién habrá dejado esta zanahoria aquí?

Revisa a su alrededor y ve las huellas de la oveja por todo el lugar.

- Qué bueno amigo tengo- se dijo el el venado- seguro que mi amiga la oveja me dejó esto para comer. Pero.. yo ya comí…mejor le llevo esta zahanora al conejito que debe estar hambriento.

Cuando el venado llega a la casa del conejo tocó la puerta y gritó

- ¡Conejo, abre, te he traído una zanahoria!

Pero el conejo no estaba en su casa. El venado dejó la zanahoria en la puerta y se fue a la su casa.

Cuanod el conejito llegó a su casa vió la zanahoria en la puerta y dijo:

-  ¡Ay! Qué  buenos amigos tengo.


Fin.